En los últimos años hemos descubierto que hay una clara necesidad de tecnologías de eficiencia energética que puedan aplicarse en el sector de alumbrado público municipal, entre otros. A solicitud de residentes o negocios cercanos, la Ciudad puede instalar una luz en un poste de energía existente en una intersección, en una calle o en un callejón, sin costo alguno para la instalación o el mantenimiento. Esta iluminación es sólo para la seguridad.

La iluminación pública es un servicio clave proporcionado por las autoridades públicas a nivel local y municipal. Sin embargo, muchas redes de alumbrado público son obsoletas e ineficientes. Para los municipios que tienen sistemas obsoletos, el alumbrado público puede representar de 30 a 50 por ciento de su consumo total de energía.

Los sistemas modernos de iluminación pública tienen una gran cantidad de beneficios:

Seguridad vial mejorada

Mejora de la visibilidad nocturna, lo que resulta en una disminución de la actividad delictiva y una mayor sensación de seguridad entre los ciudadanos

Mayor productividad debido a un aumento en la actividad legítima después del anochecer, y una jornada laboral más larga que permite a las personas viajar de manera segura en momentos posteriores

Una reducción (a veces drástica) en el costo debido al menor consumo de electricidad resultante de la tecnología de eficiencia energética

Una manera efectiva y altamente visible para que los gobiernos municipales muestren compromiso con sus electores

Los proyectos de alumbrado público se han realizado de manera efectiva a través de asociaciones público-privadas en los últimos años. A través del PPP, el gobierno contrata a un proveedor privado para el servicio (liviano, a diferencia de un activo), la propia luminaria. 

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